Casi todo el mundo ha oído hablar alguna vez de la llamada combustión espontánea. La combustión espontánea es el fenómeno qué se produce cuando una persona arde sin ningún tipo de intervención externa, quedando en la mayoría de las ocasiones prácticamente reducidos a cenizas o alguna parte del cuerpo, quedando el resto intacto.
Normalmente, las víctimas de este raro fenómeno suelen aparecer en sus casas sentados o tumbados y las llamas normalmente sólo afectan a los cuerpos de estos, dejando intacto el mobiliario de alrededor. Pero resulta que el pasado mes de septiembre las autoridades londinenses recibieron un aviso de emergencia que alertaba de la presencia de una persona envuelta en llamas en la vía pública, al norte de la capital británica.
El hecho ocurrió el pasado 17 de septiembre y a plena luz del día, pero trascendió hace unas semanas a raíz del llamamiento que hicieron las autoridades a los ciudadanos para que les ayudarán a esclarecer el caso. Algunos testigos presenciales intentaron ayudar al hombre envuelto en llamas, pero estás eran tan fuertes que solo las pudo extinguir una brigada de bomberos. La víctima fue trasladada en helicóptero a un hospital donde recibió cuidados intensivos, pero no pudieron salvar la vida de este hombre ante la gravedad de las heridas. La Policía aún no ha podido establecer las causas del incidente, por lo que la investigación no ha avanzado desde entonces.
La víctima, identificada como John Dolan, era un jubilado de unos setenta años y de origen de irlandés, que había trabajado toda su vida en el sector de la construcción. La autopsia reveló que el hombre falleció a causa de las quemaduras, pero no sé detecto la presencia de ninguna sustancia inflamable en su cuerpo. El Sr. Nolan era un miembro respetado de su comunidad y no sé conocía ningún indicio de que el hombre estuviera involucrado en algún tipo de disputa, así lo indicó el oficial que estaba a cargo la investigación.
Asimismo, también dijo que ninguno de los testigos interrogados había visto que el fallecido estuviera en contacto con alguna otra persona en el momento de producirse el fenómeno. Es decir, que el hombre se encontraba paseando y de repente comenzó a arder.
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Existen varias teorías al respecto sobre qué es lo que ocasiona una combustión espontánea, pero la mayoría de ellas fallan en varios aspectos. Desde la colilla que prende la ropa y comienza a quemar la grasa del afectado, hasta partículas subatómicas desconocidas, que, al atravesar nuestro cuerpo en determinadas circunstancias, pueden provocar una ignición celular en cadena. Incluso se dice que puede tratarse de pruebas de armas experimentales.
Pero la teoría más controvertida es la de que se indica que algunos familiares y amigos de este hombre, dijeron que el año anterior les había confesado haber tenido una experiencia “extraña”. En la mayoría de los casos de combustión espontánea, el círculo social más cercano a la víctima, relatan coincidentemente, que un año antes más o menos, la víctima les ha confesado haber tenido algún tipo de experiencia paranormal o de encuentro con extraterrestres.
la combustión espontánea permanece siendo un misterio, pero en esta ocasión, un hombre en plena “London city”, ha ardido sin ningún tipo de causa ante varios testigos y varias cámaras de seguridad del departamento de seguridad británico. La causa sigue abierta y la polémica está servida.
Miguel A. Fuentes
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