Un nuevo enfoque para encontrar vida extraterrestre propone que los extraterrestres pueden respirar hidrógeno. Por lo que es posible que pronto descubramos gases que se vinculan a la vida terrestre en la atmósfera de un exoplaneta.
Un estudio publicado en Nature Astronomy, revela que la mejor oportunidad para encontrar vida usando atmósferas, es expandir la búsqueda más allá e incluir planetas con atmósferas de hidrógeno.
Extraterrestres podrían respirar hidrógeno
Cuando se estudia la atmósfera de un exoplaneta, se observa principalmente la cantidad de luz que entra en ella cuando pasa por su estrella.
Se determina cuanta es absorbida y cuanto se ha perdido en el tránsito observando el espectro de la estrella. Esto revelará los gases que hay en la atmósfera, por lo que el telescopio James Webb, se usará para documentar atmósferas extraterrestres.
Las interpretaciones son más sencillas para una atmósfera que tiene una composición química distinta a la esperada. Esto se mantienen gracias a la actividad de la vida.
La atmósfera de la Tierra alberga metano que, cuando se combina con oxígeno, forma dióxido de carbono. Sin embargo, las actividades biológicas mantienen alto el suministro de metano.
Otra forma de verlo es que, sin los fotoorganismos fotosintéticos que liberan oxígeno del dióxido de carbono durante, lo que se conoce, como el «evento de oxigenación masiva», el oxígeno no existiría.
Según los autores el nuevo estudio, hay empezar a observar planetas más grandes que la Tierra con atmósferas de hidrógeno. Es posible que no tengan oxígeno libre, por que el hidrógeno y el oxígeno son combustibles.
El hidrógeno es la molécula más ligera de todas, puede escapar rápidamente al espacio. Una súper Tierra debe tener un planeta rocoso que tenga suficiente gravedad para sostener una atmósfera de hidrógeno. También debe tener una masa de entre 2 a 10 millones de veces la de la Tierra.
Es posible que el hidrógeno se haya tomado directamente de la nube de gas, donde se formó el planeta. O podría haber sido liberado mediante un proceso químico usando hierro y agua.
Mientras asciende, la densidad de una atmósfera dominada por hidrógeno disminuye aproximadamente 14 veces más rápido que una atmósfera dominada por nitrógeno. Como en la Tierra.
Un nuevo enfoque para la vida
Esto facilita la visualización de datos del espectro, aumentando las posibilidades de ver dicho interno al usar un telescopio óptico.
Los autores hicieron estudios de laboratorio para demostrar que E.coli, una bacteria que está en el intestino, puede sobrevivir en un entorno de hidrógeno y prosperar.
Esta observación es fascinante, pero no prueba que la vida desarrollada pueda sobrevivir. Muchos microorganismos que viven bajo la corteza terrestre sobreviven metabolizando hidrógeno. Incluso, hay criaturas multicelulares que viven en zonas libre de oxígeno en el suelo mediterráneo.
Debido a que la atmósfera terrestre se formó sin oxígeno, es poco probable que haya existido más del 1% de hidrógeno. Sin embargo, es posible que la vida temprana tuviera que metabolizar hidrógeno y carbono para generar el metano, en vez de combinar oxígeno con carbono.
Pero este estudio hizo un hallazgo más significativo; descubrieron que los productos E.coli pueden emitir una «sorprendente variedad de gases» cuando se exponen al hidrógeno.
Estos se podrían detectarse como «firmas biológicas» en un entorno de hidrógeno. Esto aumenta las posibilidades de detectar vida en un exoplaneta, pero hay que saberla buscar.
Pero la eficiencia de las actividades metabólicas que requieren hidrógeno es menor que la que usan oxígeno. Los astrobiólogos aseguran que la vida que respira hidrógeno es una idea establecida. De hecho, la ciencia ficción usa mucho este recurso.
Los autores del estudio actual también señalan al hidrógeno molecular como un gas de efecto invernadero en altas concentraciones. Esto puede mantener la superficie del planeta más caliente de lo necesario para el agua líquida, afectando la vida en la superficie.
Este estudio nos da un nuevo enfoque para buscar vida extraterrestre, más allá de grandes planetas ricos en gas como Júpiter. Por ende, el horizonte se expande cada vez más.
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